martes, 30 de mayo de 2017

Miguel Gane

¿Sabéis eso de cuando tenéis un pájaro y lo metéis en una jaula porque tenéis miedo de que se escape?
Es mucho más grande el acto de amor que te demuestra aquel que está libre, que puede volar cuando quiera y, en cambio, elige quedarse, que aquel que se queda porque siente que está atrapado entre rejas, porque tú no le dejas ninguna salida.
Pues lo mismo, pero con las personas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario