¿Cuándo es el momento oportuno para la retirada?
No lo sé.
En mi lista de fracasos, el primer lugar es el de tropezar con la misma piedra, una y otra vez.
Perdemos la vida por unos ojos que brillen por nosotros. Nos ponemos amores imposibles y pretendemos que amen hasta nuestras cicatrices. Vemos un mundo de color de rosa donde en realidad no hay nada. Fantaseamos planeando cada segundo de nuestra vida junto a alguien que no nos dedica ni una milésima de su tiempo y ninguno de sus pensamientos.
¿Acaso no hay que quererse bien a uno mismo antes de que otro nos pueda querer?
¿Acaso no tenemos que amar nuestras cicatrices antes de que otro venga a sanarlas?
¿Acaso no brillamos por nosotros mismos que necesitamos que alguien nos haga brillar?
¿Acaso no podemos deshacernos de nuestro propio caos?
Vivimos queriendo más, pidiendo más y amando(nos) menos.
La vida es el caos más bonito que existe. Disfrutenlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario